Mantenerlos frescos. Buenas prácticas en materia de seguridad alimentaria
Sus alimentos son seguros cuando son frescos y se manipulan adecuadamente. Las normas europeas y nacionales, respaldadas por la ciencia, ayudan a los agricultores, las empresas, los restaurantes y a usted mismo, el consumidor, a garantizar que cada día consume comida segura.
La forma de manipular los alimentos es importante. Desde la compra y la cocción hasta su ingesta durante la cena, hay consejos que puede seguir sobre el almacenamiento seguro, las prácticas al cocinar y la higiene de la cocina para ayudarle a desempeñar su papel en la seguridad alimentaria.
Estas recomendaciones están avaladas por los avances científicos más recientes. Los científicos europeos evalúan los riesgos potenciales de los ingredientes alimentarios y las enfermedades transmitidas por los alimentos, a fin de que las autoridades puedan informarle sobre cómo reducir los riesgos a la vez que se mantiene libre de elegir los alimentos que prefiera.
Las etiquetas de los alimentos son una fuente de ayuda. Le indican la caducidad de los alimentos frescos y el contenido nutricional de los alimentos procesados. Puede tener en cuenta esta información junto con otros elementos que para usted sean importantes, como el sabor, el coste o la reducción del desperdicio alimentario.